Por Jaime Esparza
Revisando algunos documentos de mi archivo personal encontré un ejemplar del Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Michoacán, publicado el 24 de septiembre de 1953, que contiene el Decreto número 194 expedido por el H. Congreso del Estado, en el cual se declara “Monumento Histórico” el edificio situado en la esquina que forman la avenida Hidalgo y Portal Morelos de la ciudad de Apatzingán, Michoacán, conocido con el nombre de “Casa de la Constitución” por haberse firmado en este sitio la primera carta magna de la nación mexicana.
El Congreso del Estado encomendó al entonces gobernador Dámaso Cárdenas, a fin de que dictara las medidas pertinentes para el cuidado y conservación de dicho inmueble.
Este decreto surtió efectos a partir del mismo día de su publicación.
Posteriormente el ayuntamiento cambió la nomenclatura y ahora, el edificio se localiza en la avenida Constitución número 3 esquina con avenida Morelos, y funciona desde ese entonces como Museo Casa de la Constitución. Alberga valiosos documentos históricos y extraordinarias obras de arte.
Se ha convertido en un atractivo turístico y cultural que vale mucho la pena visitar en esa próspera ciudad, corazón de la tierra caliente michoacana.
Ahora bien, no obstante que la llamada Constitución de Apatzingán de 1814 solamente obtuvo el rango de Decreto Constitucional para la libertad de la América Mexicana, significó gran avance en la lucha independentista, pues en ella se asentaron muchas de las ideas del Generalísimo José Ma. Morelos y Pavón, convirtiéndose en el insustituible antecedente inmediato que sentó las bases para la promulgación de la primera Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 1824.
Lic. Jaime A. Esparza Cortina.