COAHUAYANA, Mich., 26 de febrero de 2025.- Una verdadera inundación de negocios de máquinas tragamonedas es la que se está presentando en el municipio de Coahuayana, donde este tipo de mini casinos están proliferando con locales exclusivos en avenidas importantes y en tiendas de abarrotes en colonias y pueblos, sin importar que están prohibidas en la ley federal.
Lo anterior fue denunciado por padres de familia coahuayanenses que señalaron esto ocurre pese al compromiso expresado por el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla de erradicar en Michoacán las máquinas tragamonedas, al señalar que son un instrumento de destrucción social, una puerta de entrada a la delincuencia y una amenaza para las familias, especialmente para niños, adolescentes y jóvenes.
Los paterfamilias indicaron que el mandatario estatal enfatizó correctamente que el daño no es solo económico, ya que son una trampa que corrompe a los jóvenes, al fomentar el abandono escolar y exponerlos a entornos de riesgo y violencia.
Igualmente, se unieron al llamado que el gobernador Alfredo Ramírez hizo a la población a no permitir que la delincuencia se disfrace de entretenimiento, y a no normalizar el uso de las máquinas tragamonedas que destruyen la vida de los jóvenes y alimentan al crimen y a la violencia, al denunciar su instalación y operación para proteger a niños, adolescentes y jóvenes.
Por último, se denunció que en Coahuayana, los negocios de maquinitas tragamonedas operan sin licencia municipal, y se exigió que sean retiradas y destruidas como se hizo en Morelia, Uruapan y otras ciudades de Michoacán.